I: El superviviente
Aturdido, mira la sangre que le cubre.
Le lleva un tiempo descubrir que la mayor parte no es suya.
Gimiendo por el esfuerzo y el dolor, empieza a arrastrarse hasta que consigue salir de debajo del cuerpo despanzurrado del caballo, contemplando con la mirada perdida el desolador paisaje a su alrededor: restos de hombres y animales yacen esparcidos hasta donde alcanza la vista.
Y la sangre.
Toda esa sangre... No tenía ni idea de que un ser humano podía contener tanta sangre, ni que podía salpicar tanto y tan lejos. Por no hablar de un caballo.
Nota cómo la bilis se acumula en su garganta, y se inclina para vomitar.
“50” - piensa - ”Éramos 50 cuando llegamos...” -
¿Realmente habían pasado sólo unas horas?
Busca a tientas su rifle reglamentario entre las alforjas. El peso del Winchester entre las manos le hace sentirse algo mejor.
Luego,usando el arma como muleta improvisada, empieza a andar, arrastrando la pierna destrozada.
El pueblo estaba al norte, recuerda, no muy lejos. Quizás allí tenga una oportunidad.
Le lleva un tiempo descubrir que la mayor parte no es suya.
Gimiendo por el esfuerzo y el dolor, empieza a arrastrarse hasta que consigue salir de debajo del cuerpo despanzurrado del caballo, contemplando con la mirada perdida el desolador paisaje a su alrededor: restos de hombres y animales yacen esparcidos hasta donde alcanza la vista.
Y la sangre.
Toda esa sangre... No tenía ni idea de que un ser humano podía contener tanta sangre, ni que podía salpicar tanto y tan lejos. Por no hablar de un caballo.
Nota cómo la bilis se acumula en su garganta, y se inclina para vomitar.
“50” - piensa - ”Éramos 50 cuando llegamos...” -
¿Realmente habían pasado sólo unas horas?
Busca a tientas su rifle reglamentario entre las alforjas. El peso del Winchester entre las manos le hace sentirse algo mejor.
Luego,usando el arma como muleta improvisada, empieza a andar, arrastrando la pierna destrozada.
El pueblo estaba al norte, recuerda, no muy lejos. Quizás allí tenga una oportunidad.